Los Chacras 2ª Parte

CHACRA CREATIVO 

Este chacra es el centro de la sexualidad, de las emociones, sensaciones, el placer, el movimiento y el instinto de protección.

Si en el chacra Raíz se retiene y se crea estructura, elemento tierra. En el Creativo, hay que soltar para crear una corriente fluida, elemento agua, que representa el movimiento y el cambio.

La conciencia progresa a través del cambio. En eso consiste la esencia y la función de este chacra.

Como representa al elemento agua comparte sus características como la fluidez, la falta de forma permanente, la movilidad y la entrega.

El chacra sacro rige nuestras emociones y el bienestar, y de cuán indiferentes, deprimidos  o emocionados nos sintamos en relación con lo que estamos viviendo. Puesto que tiene que ver con los deseos su energía crea cambios que nos hacen sentir irritables, sensuales, llorosos o agresivos.

Cuando nos emocionamos se produce un movimiento de la energía a través del cuerpo. Esta corriente de energía nutre el cuerpo, lo purifica y lo sana porque arrastra a su paso todo lo que obstruye su avance. Nuestros sentimientos son nuestra fuerza vital, mediante la cual obtenemos el cambio.  Siempre que seamos nosotros quien gobierne, si los sentimientos no son comprendidos esa misma fuerza puede ser autodestructiva.

Este centro trata de lo que sentimos, tanto a nivel físico como emocional. Atender a nuestra necesidad de expresión sexual es otra forma de admitir el placer en nuestra vida. Nuestra capacidad para aceptar el placer depende de nuestras actitudes. Es sano aceptar que somos seres sexuales y que tenemos cuerpos físicos que responden al placer.

El orgasmo revitaliza y limpia el cuerpo arrastrando la energía atascada y la tensión profunda. El orgasmo sexual es importante para el bienestar físico de la persona. La inyecta una sobrecarga de energía inocua pero que actúa como desatascador.

 

También establece los límites (lo que es suficiente) de nuestros apetitos emocionales y físicos. Puede querer cada vez menos o cada vez más. Ambos reflejan la misma falta de equilibrio que se basa en una sensación de carencia y falta de capacidad para conocer la verdadera medida de las cosas, situaciones o personas.

Un sentido real de bienestar, de placer y de abundancia es conocer realmente cuándo, qué y quién es “suficiente". La abundancia no se refiere a cosas materiales, sino a tu actitud en relación con lo que tienes y a como te hace sentir.

La forma en que expresamos esta nueva conciencia en las relaciones depende de la imagen que tenemos de nosotros mismos, de la conciencia de nuestro cuerpo y de nuestro nivel de sensibilidad emocional. Tenemos muchas ocasiones para aprovechar esta energía. Podemos utilizarla para que los demás aprecien nuestro atractivo. Podemos sublimar esa energía a través de diversas actividades o podemos compartirla con alguien que amamos y que nos valora. También podemos mantenerla oculta y pretender que no existe.

Cuando sentimos que lo que tenemos y lo que somos es suficiente, el chacra funciona de modo óptimo, y estamos tranquilos y complacidos.

Los arquetipos, personalidades o roles que genera  este chacra son el Emperador/Emperatriz y el Mártir.

La parte frontal del chacra  regula la capacidad de dar y recibir, amor y placer.

Mientras que la parte trasera regula cómo se siente la persona con relación a sus deseos, tanto satisfechos como los insatisfechos. También es la cantidad de energía sexual.

 

ABIERTO

  

La forma en que consideramos y experimentamos el placer es consecuencia de la apertura de este chacra que se corresponde directamente con nuestra sensación (consciencia) de ser suficientes.

Está relacionado con la calidad del amor que puede tener la persona.

Cuando está abierto, facilita el dar y recibir placer sexual y físico. Lo más probable es que la persona disfrute con el sexo y tenga orgasmos.

El arquetipo, personalidad o arcano que representa este chacra abierto, tanto en su parte anterior como posterior, es la Emperatriz/el Emperador.

Ama el mundo material y puede vivir con generosidad disfrutando de la tranquilidad, la comodidad y el placer.

Disfruta también compartiendo su riqueza y su bondad con los demás. Es el amor del emperador, que ofrece de todo lo que tiene. En lo opuesto tenemos el amor del mendigo que da solo de lo que le sobra.

Sabe como cuidarse, respeta las necesidades del cuerpo físico y tiene una conciencia de bienestar y deleite. No se castiga ni se priva cuando se trata de satisfacer sus deseos y necesidades, pues sabe que puede y debe haber prosperidad y placer en la vida.

Si estamos realmente satisfechos con nuestra vida, no necesitamos probar nada a nadie. Este chacra desempeña un papel directo en la forma en que respondemos a los demás y en la sensación que experimentamos cuando permitimos que el bienestar exista en nuestra vida.

Es fundamental darnos cuenta que podemos elegir producir cualquier cambio, ya sea placentero o desdichado. Tenemos la capacidad de cultivar el placer o el dolor,  la felicidad o la desdicha.

Con este centro abierto la persona siente su potencia sexual y creadora.
Todo deseo pone en marcha una energía y negarlo sólo serviría para bloquear la salida de esa energía, que tratará de expresarse de nuevo en otro lugar.

Si la parte delantera se encarga de regular nuestro bienestar en relación con los demás, la parte posterior se encarga de regular nuestros deseos y como nos relacionamos con ellos. Enseña a ser fluidos y flexibles en nuestros deseos. La fuerza del deseo es la raíz de nuestra pasión y llega a serlo también de nuestro poder y entendimiento si la energía fluye por este chacra abierto expresándose de una manera armoniosa.

Demasiado abierto

Cuando está girando a mayor velocidad la persona no puede controlar sus deseos e impulsos, es esclava de sus pasiones porque toman el control del sujeto sin conciencia alguna. Produce personas emocionalmente inestables, fantasiosas, manipuladoras e incluso adictas al sexo.

CERRADO

Por otro lado el arquetipo, personalidad o rol que representa el chacra  cerrado, da igual que sea el anterior o posterior, son los mártires.  Incapaces de disfrutar de las cosas buenas de la vida.

Se castigan a sí mismos y a aquellos con quienes se relacionan. La vida es concebida como algo pesado y difícil. Utilizan su energía en cuidar a los demás, y se ofrecen a sí mismo muy poco de lo que realmente necesitan. Sufren debido a una sensación de carencia. Eligen mantenerse apartados del amor, la calidez, la comodidad y el placer.

Cuando nos resistimos a alegrarnos por algo o alguien reflejamos nuestra rigidez. Es nuestra forma de castigarnos por el odio que sentimos hacia nosotros mismos, proyectando estos sentimientos en los demás. Cuando las personas se odian a sí mismas arrasan con todo lo que llega a sus vidas. Este es el arquetipo del mártir, ese nivel de conciencia que rechaza el placer y escoge el sufrimiento.

Este tipo de sentimientos negativos afecta al modo en que experimentan los otros aspectos del chacra, la capacidad de divertirse, conseguir riquezas, prosperidad y tranquilidad. El martirio implica no cambiar las actitudes negativas que contribuyen a esa situación.

La vida de los mártires está sumergida en una sensación de carencia que da la justificación para no cambiar de creencias y conductas, porque no hay suficiente buena fortuna en el mundo y les ha tocado vivir la situación más difícil. Por eso gimen y se quejan, pero no hacen nada por cambiarlo. Más que el deseo activo de cambio y desarrollo, tienen una aceptación pasiva de la vida.

El sexo es una necesidad tanto física como emocional.
El resultado del bloqueo puede ser una incapacidad para lograr el orgasmo y disfrute de las relaciones sexuales, porque no puede abrirse a la alimentación sexual de su pareja y recibirla.
Si bloquea este chacra en particular, su fuerza y potencia sexuales serán débiles y decepcionantes. Probablemente no tendrá mucho impulso sexual y tratará de evitar el sexo negando su importancia y su placer, lo que dará lugar a la desnutrición del área citada.
Dado que el orgasmo se encarga de inundar el cuerpo de energía vital, el organismo no será alimentado y no recibirá la nutrición física y emocional del contacto físico con otro cuerpo. Hay un temor, en algún nivel profundo, de dar rienda suelta a toda su potencia sexual.

Bloqueado

Cuando el chacra no gira o lo hace muy lentamente. Son personas que son excesivamente sensibles, duras consigo mismas, se sienten culpables  sin razón alguna, sufren de frigidez o impotencia.

Combinaciones

Se hace difícil combinar una enorme potencia sexual con una actitud abierta a dar y recibir en las relaciones sexuales.
Es frecuente que la potencia sexual se convierta en fantasía porque el impulso sexual va acompañado de imágenes negativas, violentas, fantasías sexuales o lo que sea que a la persona no le permite desinhibirse. Esto conlleva a evitar por completo el asunto del sexo debido  a la vergüenza o el miedo que le producen estos sentimientos interiores. Esto, por supuesto, dificulta aún más la satisfacción del impulso, que en vez de ser comprendido y satisfecho, es bloqueado.

Por ejemplo, cuando el centro posterior es fuerte en el sentido de las agujas del reloj y el delantero es débil o está cerrado, la persona tendrá un fuerte impulso sexual y probablemente, una gran necesidad de relaciones sexuales. El problema es que esa gran cantidad de energía sexual no va acompañada de la capacidad de dar y recibir sexualmente y por tanto, será muy difícil de satisfacer ese impulso.
Puede ser que la persona tenga muchos amantes sexuales, puede que rompa sus compromisos o que no sea capaz de establecerlos en relación con el sexo. Cuando nuestro impulso sexual nos ciega, la atención está centrada en el sexo como objetivo.

Equilibrado

Estas personas son confiadas, expresivas, en sintonía con sus sentimientos y creativas.