lunes, 9 de octubre de 2017

Familias de Almas: Los 7 Rayos






Las almas se agrupan en familias o grupos. Aunque cada alma que compone un grupo es individual comparte unas características y principios con el resto de almas de ese grupo. Es muy poco frecuente encontrar almas que pertenezcan a una sola familia, lo normal es pertenecer a 2, 3 o 4 familias y con todas ellas se comparten rasgos. Un reflejo de estas combinaciones podemos encontrarlo en nosotros mismos. Pertenecemos a la familia de nuestro padre y a la de nuestra madre, formando a su vez una familia nueva. De ambas familias tienes características, aunque expreses unas más que otras. Pués las almas funcionan igual.
Vamos a asociar cada familia de almas con un color. De tal manera que tenemos los colores primarios que son: azul, amarillo y rojo. Colores secundarios, que surgen de la combinación de los primarios. Primario y secundario es una clasificación que no indica orden ni prioridad, no hay colores mejores que otros.

Ya con anterioridad hemos hablado sobre las almas en una entrada dedicada a la edad del alma, aquí dejo el enlace:

 Las edades del alma

En esta entrada quiero describir los rasgos comunes que poseen las almas que pertenecen a un rayo, color. Cada rayo o color dota a esa alma de un poder o fuerza para llevar a cabo su misión y evolución. Conocer el rayo o color al que perteneces te dará un gran conocimiento interior.



Rayo Rojo

El poder de la Voluntad

El alma del rayo rojo es fuerte, alegre, optimista y desborda energía e ilusión. Son almas luchadoras que no se rinden ante los obstáculos, y és ese afán de lucha lo que les hace evolucionar. Son destructores de formas cristalizadas obsoletas y lo hacen a través de la fuerza de voluntad. También son ambiciosos y pueden llegar a conquistar lo que se propongan con la tenacidad que les caracteriza.
Estas almas suelen evolucionar rápido pero su camino es muy difícil.
 
 Aspiran llegar a metas muy elevadas y disponen de la energía y la fuerza de voluntad necesarias para alcanzar cualquier cosa que se propongan.
Sus deseos y objetivos vienen justificados con alguna causa que consideran justa. De ese modo sus aspiraciones se convierten en algo más que un simple deseo material de un mortal.

Poseen gran poder de convicción, así que si se lo proponen son capaces de arrastrar consigo a cualquier persona. De hecho suelen despertar cierta admiración sobre las personas de su entorno por su fortaleza, decisión y la capacidad de convertir sus sueños en realidad.

 Como contrapartida puede llegar a exigirse mucho a sí mismos. A veces se presionan tanto que se bloquean y terminan con una sensación de frustración demasiado grande. Por ello pueden caer fácilmente en enfermedades como el estrés y la depresión.

 Cuando nos esforzamos por alcanzar algún objetivo importante en nuestra vida y estamos poniendo todo de nuestra parte, incluída nuestra fe, para conseguir lo que nos proponemos, estamos utilizando la energía del rayo rojo.
También la utilizamos cuando estamos atravesando un momento demasiado exigente con nosotros mismos. Quizá nuestros objetivos sean demasiado elevados y el listón esté tan alto que nos resulte difícil llegar. Cuidado con el estrés, la frustración y la depresión.

Estas almas se relacionan bien con otras porque siempre están deseando participar y aportar nuevas ideas. Aunque pueden llegar a ser, sobre todo si están poco evolucionadas, egoístas, impulsivas y con tendencia a imponer sus ideas a los demás. Con su don de gentes puede convertirse en alguien muy manipulador e incluso peligroso si quisiera arrastrar a las masas con malas intenciones.

Si están evolucionados y conectan con la energía de su rayo se convierten en luchadores. En el transcurso de su encarnación  tienden a ejercer el rol de defensores.
 Estas almas necesitan encarnarse para sembrar la compasión sobre la densidad del entorno. La misión de esta familia consiste en defender y luchar contra todo lo que está obsoleto y no sea íntegro.
 Por eso, para los miembros de esta familia, la encarnación es un periodo delicado y una gran prueba. Se les percibe bajo una coraza, pero debajo, rebosan amor.


 
Rayo Naranja

El poder de la Creatividad

Almas sensibles, cariñosas y amables con todo el mundo que buscarán experiencias en las que su participación sea importante ya que uno de sus objetivos es ayudar a los demás a resolver conflictos y alcanzar la armonía entre aspectos opuestos.

Esta familia destaca por su capacidad para solucionar aspectos en los que varias personas estén involucradas. Son muy  diplomáticas y a la vez son muy románticas. Sus sentimientos suelen ser sinceros, el problema es que a veces son tan sensibles que acaban encerrandose en sí mismos.  No son estadistas ni científicos, pero pueden ser magníficos poetas, amantes del arte, o grandes instructores cuando reconocen que sus cualidades pueden ser útiles a los demás. Les gusta pasar desapercibidos y cuando alguien les da una responsabilidad son cumplidores y eficaces.

Pero en su vida privada suelen experimentar situaciones de mucha tensión como consecuencia del enfrentamiento entre opuestos, pero son estas dolorosas experiencias las que les llevan a una rápida evolución.

 La característica principal de esta familia es la de crear armonía entre aspectos opuestos, y lo consiguen gracias a su creatividad e imaginación.

Ellos evolucionan a traves del conflicto por lo que experimentan y atraen a su vida esas experiencias conflictivas. Su misión es trascender cualquier dualidad y lo hacen en perfecto equilibrio entre amor y sabiduría. Su poder creativo es muy fuerte pero deben aprender a canalizarlo, por lo que tienden a ser un poco extremistas ya que necesitan experimentar ambos opuestos.

 Un ambiente familiar que les procure estabilidad es muy importante para ellos, debido al permanente conflicto que experimentan.
 
Su vida transcurre entre periodos de acción y de inercia (situaciones completamente opuestas) y en ambos momentos expresan su armonía y creatividad. Esta familia crea tanto en los momentos de actividad como en los momentos de dejarse llevar. Aunque puede pasar que con la densidad de la encarnación el alma se encuentre con la resistencia de la personalidad (ego) hasta que un buen día suelta los apegos y decide emprender esa visión interior y entonces decide cambiar de vida.

Para estas almas su fuerza es la creatividad y la armonía, pero el obstáculo más grande al que se enfrentan es el ego, que actúa de barrera para iniciar el movimiento.

Cuando rige la inercia el alma está atrapada en una zona de confort, se siente atraída por las comodidades. Prefiere una vida sencilla y tranquila, sin complicaciones. Sin interés por ayudar o comprometerse con nada ni con nadie. En esta fase puede convertirse en una persona manipuladora capaz de hacer lo que sea para cumplir sus deseos. Y en vez de ayudar a los demás se vuelve egoísta y superficial. En esta fase su interés es que les dejen tranquilos para poder alcanzar sus sueños.

 Mientras que cuando están en una fase de actividad se convierten en personas de gran valor, efectivas e intuitivas. Muy adaptativos, saben manejarse muy bien dentro de cualquier grupo. En esta fase son un torrente de creatividad, e imaginación. Y si dan rienda suelta a su capacidad se convierten en personas inolvidables. 

Actúas con la energía de este rayo cuando experimentas conflictos, situaciones donde se dan ambos extremos o necesitas alcanzar una armonía en una situación aparentemente irreconciliable.

RAYO AMARILLO

El poder de la Inteligencia 


Esto no quiere decir que los únicos inteligentes son los que pertenecen a esta familia, los demás también pueden ser muy inteligentes, esto sólo quiere decir que ésta familia destaca por su brillantez, inteligencia, agilidad mental y es así cómo logran la evolución.

El individuo con color amarillo es una persona muy sociable y atenta. Son ágiles pensadores, a veces tanto, que están pensado en mil cosas a la vez. Siempre están pensando en algo que tratan de hacer realidad, ya sea una empresa, una idea, un invento, un sueño...Siempre tiene deseo de adquirir conocimiento puro, independientemente de lo que ya sepan, siempre quiere aprender cosas nuevas, escalar nuevas cimas, conseguir más comprensión sobre un tema y obtener más sabiduría.

Disfrutan mucho con los debates, escuchando y opinando sobre cualquier cosa. Son buenos estudiantes y les encanta saber muchas cosas. Saben hacer divertir a la gente y disfrutan estando con otras personas. 


Como contrapartida puede llegar a convertirse en una persona excesivamente crítica consigo mismo y con los demás. Y es que pueden terminar como esas personas que siempre están sacando lo malo en todo lo que ven y hacen.
A veces piensa en tantas cosas a la vez que los despistes pueden ser constantes. Tanto, que pueden crearse un mundo ideal alejado de la realidad.



En este rayo podemos distinguir 2 tipos de almas: el pensador abstracto y el pensador concreto.

El pensador abstracto es filósofo, matemático, astrólogo que mediante la inteligencia captan la esencia de la verdad; son idealistas, impulsivos, soñadores y teóricos. Evolucionan a través de reflexiones filosóficas, con una actitud de entrega y servicio a los demás.
El pensador concreto es un investigador científico que necesita hechos, poder medir y cuantificar, se guía por la lógica pero su principal problema es la rigidez mental.
 
Tanto si son de un tipo de pensador u otro, destacan por su brillantez mental. Llegando a descubrir grandes verdades tan sólo reflexionando sobre ellas.

 
Rayo Verde
 

El poder de la Sanación

Alma encantadora, sensible y con gran determinación. Su energía sirve para ayudar a sanar a otras personas o a reparar situaciones y relaciones en las que hay un desequilibrio o enfermedad. Y es que es muy humanitario y con grandes dotes de sanación, podría ser perfectamente un médico, un voluntario o simplemente una persona anónima que cuando puede ayuda a los demás.

Tienen una gran determinación por lo que suelen acabar todo aquello que empiezan, incluso a pesar de que se les diga que es imposible.


Las almas que la componen transmiten la energía de la sanación y la prodigan de todas las manera posibles.Los miembros de esta familia no solo lo contienen sino que también lo canalizan y lo esparcen. Esta energía fluye aunque no sea consciente para la persona, sin embargo se intensifica cuando se es consciente de ella.
 
Cuando estas almas colocan descuidadamente la mano sobre un amigo o una planta, por ejemplo, la energía fluye y surte efecto. Aquello que tocó mejora de forma inmediata. Estas almas no solo sanan a los seres humanos, sino también a las plantas, animales, objetos... Sanan todo lo que tocan.
 
Las almas de este rayo se resisten a reconocer la energía sanadora que portan, aunque está dentro de ellos, la buscan fuera; su mayor dificultad es reconocerlo. Una de las pruebas que deben superar las almas encarnadas de esta familia es el ego. Ya que la energía de la sanación es muy potente y esto puede constituir un riesgo porque al ego le resulta fácil aprovecharse de ello. No obstante, no son victimas de nada ni de nadie, pues esto forma parte de su aprendizaje .
 
Muchos sanadores padecen enfermedades por el hecho de no reconocer esta energía. Es necesario que reconozcan y asuman su realidad, porque cuanto más eviten esta cuestión, más enfermedades tenderán a generar. Resistirse provoca bloqueos que en la encarnación se manifiestan como dolores y enfermedades sobre todo físicas.
Su misión es ayudar a que el planeta y todos sus elementos sanen y alineen sus vibraciones en un estado de paz y amor.

Hay un subgrupo dentro de esta familia, son también sanadores pero se responsabilizan de que esta energía sea canalizada en su máxima pureza, la energía del amor. Ellos protegen y defienden que la energía sanadora no se corrompa de ningún modo o actúe perjudicando más que sanando. Lo protegen de energías incompatibles y actúan donde la energía sanadora no puede fluir.
 Tienen un gran sentido de la responsabilidad y es preciso que vayan con cuidado porque suelen acumular mucho peso en sus hombros y pueden caer fácilmente en la tentación de salvar a todo el mundo.

Su inocencia es casi infantil y eso a veces les puede traer algún problema ante personas no tan puras como ellos.
Se entregan totalmente por ayudar a los demás y disfrutan haciéndolo. Lo suyo son las causas humanitarias y la lucha contra las injusticias. Sin embargo, sin quererlo, a veces se dejan arrastrar por las malas artes de algunos que les rodean.
Son afables y bonachones, les gusta abrazar a las personas y no dejar que nadie sufra. Sin embargo ellos si sufren bastante. De hecho sin darse cuenta pueden terminar convirtiéndose en personas extremadamente sufridas debido a su enorme corazón.

Podríamos pensar que son personas más débiles sin embargo sucede todo lo contrario. Su sensibilidad y la fuerza de sus sentimientos le dotan de una impresionante capacidad de lucha.  
Cuando ven frustrados sus deseos pueden sentirse especialmente mal. De manera que aquellos sentimientos negativos los viven con más intensidad que las demás personas. Así pues corren el riesgo de deprimirse fácilmente si no se sienten entusiasmados.
El afecto es fundamental en sus vidas y sin él pueden sentirse hundidos.

Son personas muy sacrificadas y persiguen con ahínco hacer sus sueños realidad, por utópicos que nos puedan parecer a los demás. Saben tomar decisiones y disfrutan con su libertad y capacidad de maniobra para sacarle el máximo rendimiento a sus vidas.

Son muy afectuosos y necesitan estar demostrando continuamente su afecto por los demás. Además necesitan mucho cariño para saber que su vida tiene algún sentido. Si no lo encuentran sin duda alguna lo buscarán hasta encontrarlo.


 Es posible que se vuelvan dependientes de la opinión de los demás, olvidándose así de su propia personalidad y luchando por convertirse en lo que los demás desean de él.
  
Como contrapartida, si falta evolución, puede llegar a convertirse en una persona despiadada y egoísta que se mueve por la vida con el único fin de convertir en realidad sus intereses. Le da igual el sufrimiento de los demás, es posible que diga unas palabras, pero en lo más profundo de su corazón no piensa hacer absolutamente nada. Con su aspecto amable puede engañar a muchas personas para que hagan lo que él desea, de manera que puede terminar siendo un manipulador enmascarado. Incluso pueden hacer de su sufrimiento la clave de su dominación, puesto que el papel de víctima lo suelen desempeñar a la perfección.
Su fabulosa tenacidad puede llegar a transformarse en tozudez y cerrazón.


Actúas con la energía del rayo verde cuando experimentas una etapa en la que tenemos ganas de hacer algo por el mundo, de ayudar a los demás o de entregarte al máximo para que alguien deje de sufrir. Cuando estamos atravesando una etapa en la que estamos en armonía con la gente y deseamos la felicidad a todos. Nos sentimos seguros de nosotros mismos y poseemos la tenacidad para alcanzar nuestros sueños. En uno de estos extremos tal vez quieras apuntarte a alguna ONG, o hacer algún tipo de voluntariado. Sin embargo estos actos de entrega y servicio a los demás también pueden ser menos trascendentales, pero muy importantes.

RAYO AZUL
El poder de la comunicación

Estas almas poseen grandes dotes comunicativas y grandes ideales. Se dedican a comunicar y a transmitir el amor y el conocimiento a través de las palabras ya sean habladas o escritas. Normalmente dicen exactamente lo que la otra persona necesitaba escuchar. 

Se distinguen de otros grupos por el hecho de no estar atadas a lo físico. Prefieren la sinceridad y la franqueza aunque pueda herir. También saben ser diplomáticos y les entusiasma hacer cosas nuevas. Hacen caso de su intuición sin importar lo que le diga la gente. Se muestran abiertos para debatir, reflexionar y pensar sobre cualquier ideal.

Su ligereza no las ayuda precisamente a encarnarse. Para ellas, lo físico no tiene ninguna importancia, Por eso, en el seno de esta familia, en el periplo de la encarnación y la personalidad, olvidan que, por encima de todo, son comunicadores y no necesariamente de la forma que impone la sociedad.
 
Estas almas enseñan toda suerte de conocimientos y experiencias. Y lo hacen a través de las palabras. Enseñan el amor, la luz, la pérdida, la desilusión, la escucha, lo importante que es vivir el ahora...

Las almas de esta familia poseen y transmiten la energía del conocimiento, energía que las identifica plenamente. En su condición de almas encarnadas, van en busca de la verdad, del conocimiento y su anhelo de transmitirlo es muy grande.
 
Si la transmisión del conocimiento sigue un camino tortuoso y se distorsiona, aparece otro subgrupo de esta familia cuya intención seria la de actuar como guardianes de la energía del conocimiento, en claro paralelo con los guardianes de la energía de la sanación.
 
Estas almas son fáciles de reconocer porque enseñar las colma de una gran alegría, ya que esa es su vocación, sea cual sea la forma que adopte. Incluso lo hacen sin que sean conscientes de ello con algún comentario que quién está escuchando necesitaba oír.
 
Cuando sus almas no están evolucionadas son mentalmente dispersos, inestables emocionalmente, o pueden mentir y callar hasta explotar.


RAYO ÍNDIGO

EL PODER DE LA CONSCIENCIA

 
 Es una persona cariñosa y muy comprensiva. Es precisamente su facilidad para comprender las cosas y dar buenos consejos por lo que la gente disfruta con su presencia. El poder de estas almas es despertar la conciencia. No desencadenan ningún movimiento que no sirva para concienciarse de algo. Estas almas vienen para ponerse al servicio de la evolución, del despertar de la consciencia.

Para un índigo, ayudar a los demás a ser más conscientes es una verdadera satisfacción. De hecho son personas muy intuitivas y aunque también muy lógicas, saben encontrar el equilibrio entre la mente y los sentimientos. Irradian una especie de candidez y ternura admirada por mucha gente.

Desean disfrutar todo lo posible de la vida. Les gustan las cosas sencillas  Pasar un día en el parque con un ser querido puede hacerles enormemente felices. Suelen ser personas muy profundas que buscan ante todo en las personas la sinceridad.
 
Si esta alma está poco evolucionada puede llegar a convertirse en el perfecto manipulador debido a su don de gentes, puede terminar consiguiendo hacer con los demás lo que más le interese, incluso aparentando que es por el bien de los demás.
 También ocurre en esta familia, cuando el alma está poco evolucionada, que la persona esté muy frustrada debido a una obsesiva necesidad de perfeccionarlo todo hasta el límite. En este sentido, sufrirá mucho porque será incapaz de alcanzar su ideal máximo para sí mismo y para los demás. Debe tener cuidado porque puede pecar de idealista y utópico.
 
Como contrapartida  puede sufrir de pasividad. No es una persona muy activa y eso le puede traer problemas incluso de salud. Y es que tanto vivir en la mente le puede hacer perder de vista las cosas más materiales como el trabajo, la casa, la familia y su cuerpo. Es posible incluso que rechace la vida mortal por ello.
Esto le puede traer problemas para socializarse y vivir una vida más mundana. Incluso puede recurrir a sus sueños para huir de los problemas y no decidirse a enfrentarse a ellos.



RAYO VIOLETA
 
EL PODER DE LA TRANSFORMACIÓN 

Estas almas se encarnan para espiritualizar la materia. Ayudan a que las almas pasen de un umbral vibratorio a otro y afinen su identidad en el cambio. Les cuesta mucho integrar su envoltura física y suelen resistirse a la encarnación. Funcionan como un canal que conecta el mundo material con el espiritual. Suelen ser atraídos hacia el esoterismo y prácticas ocultistas. Algunos se convierten en personas religiosas, otros emprenden el camino del autoconocimiento. Las cosas del mundo material no les preocupa demasiado, pero sí está muy pendiente de su crecimiento espiritual y personal.
El mundo interior les resulta apasionante y no quieren perder el tiempo con otras cosas más materiales y mundanas. Aunque puede darse el caso de que estén buscando un guía o gurú que les indique donde está el camino.


Como contrapartida puede desarrollar lo que en términos esotéricos se llama "ego espiritual". Es decir, que esté tan conectado a las cosas del espíritu, que se va aislando del mundo paulatinamente con la idea de que está por encima de él. Así desarrolla un orgullo espiritual muy destructivo y poco útil para su evolución espiritual que le llevará a un círculo vicioso del que resulta difícil salir. Creer que se es superior, con un mayor entendimiento que los demás y pensar que se está en posesión de la verdad. Aunque aparenten ser muy buenos, comprensivos y caritativos.

Además, al ser una persona tan intimista, y buscar muchos momentos de soledad para profundizar en sí misma, puede llegar a desconectarse del mundo y de la realidad material. Desentendiéndose de cualquier aspecto que tenga que ver con la materia creyendo que le impide o distrae de seguir creciendo espiritualmente.
 Una de las dificultades con las que topan durante su encarnación es la de quedar absorbidos por la experiencia física, abrumados por su peso. No nos referimos físico sino a la opacidad personal. Corren el riesgo de olvidar que arde en ellos el fuego de la transmutación, de olvidar quienes son o negarlo, lo que provocaría fugas de energía vital. Estas almas  están en transformación constante y su cuerpo físico les sirve de canal, de herramienta.

Cuando no están encarnados ayudan a las almas a pasar por los diversos umbrales vibratorios, es decir ayudan a entender e integrar el cambio que supone pasar de la vida a la muerte y de la muerte a la vida. Cuando están encarnados asisten en los cambios que trasforman y ayudan a que el alma no se pierda. El paso de la infancia a la adolescencia, de un trabajo a otro, el tránsito hacia la muerte. Facilitan estas experiencias de intenso cambio puesto que son épocas de gran evolución para el alma.

  Entablan a menudo comunicación con el más allá y la noche es el momento más propicio para ello. Durante la encarnación podrían exclamar al levantarse: “¡He trabajado duro esta noche!” y seria verdad, porque no paran nunca. Por su identidad vibratoria, estas almas gozan de una gran cualidad: querer ayudar a las almas en todo momento y lugar. En cuanto alguien las necesite y solicite su ayuda, acudirán sin falta. Las caracteriza esa gran disponibilidad, de día y de noche.
 Atraen a las almas errantes, que no tienen identidad o que la han perdido. Esas almas se dirigen a ellos porque los reconocen del más allá, pues fueron ellos quienes las ayudaron a afinar su identidad vibratoria en el cambio de la vida a la muerte y viceversa.
Sienten con frecuencia la nostalgia del más allá y no saben qué hacer con ella. Tal vez incluso anhelan morir porque la identidad vibratoria de su alma no les interesa demasiado. Bordean el mundo de la no identidad, y eso puede traer confusión para el alma encarnada.

 
En el ámbito de la experiencia física gozan del don de desmaterializar todo lo que tocan. Lo cual explica sus problemas con las llaves, puertas, paredes, electrodomésticos... Su capacidad de volatilizar cosas materiales, sin siquiera darse cuenta de ello, hace que tengan la sensación de ser torpe o un desastre en el manejo de cosas materiales. Ante la densidad, actúan mediante la difusión de ondas que emanan de su cuerpo, y esto nada mas encarnarse, desde la más tierna infancia.


Han elegido encarnarse no porque les guste la densidad, en absoluto. Han venido porque su presencia contribuye a transmutar la materia. Podríamos decir que son auténticos transformadores vivientes. Su principal dificultad, al encarnarse, reside precisamente en eso, en encarnarse. Si consiguen conocerse mejor y saber quienes son, pueden aplicar su poder y utilizarlo en la sanación, en la comunicación, en todos los oficios y profesiones del mundo. Pueden transmutar todo lo que esta a su alrededor, lo cual significa enfocarse en un estado vibratorio y activarlo de tal manera que pierda su densidad o actual estado vibratorio para pasar a otro más sutil y menos denso. Ayudan a elevar las vibraciones de todo lo que le rodea. Y el amor es la clave de la transformación.